Querida Beatriz:
El gateo es recomendable ya que ayuda a frotalecer los músculos y las articulaciones, mejora su capacidad de coordinación y equilibrio y le permite satisfacer su curiosidad por el medio.
A la vez te digo que no has de forzarla, hay muchos niños que pasan directamente a la bipedestación y no hay ningún problema. Que vuestra hija gatee, no solamente depende de lo que la estimuléis, también entran en juego muchos otros factores como por ejemplo la maduración del sistema nervioso central, por lo tanto tampoco es bueno que la forcéis demasiado.
Algunas actividades para su estimulación:
- Dobla una tela ancha tres veces a los largo hasta que tenga una anchura de 10 o 15 cm, pasa este “cinturón” por le tórax de tu hija y aguanta los extremos con una mano. Levántala con ayuda de la tela hasta que solamente toque el suelo con las manos y las rodillas. (Si el bebé empieza a moverse como si quisiese nadar es señal de que todavía es pronto para este ejercicio)
- Ponte en el suelo con tu hija, en posición de gateo. Finge que eres un gato y maúlla: «Miau, miau». Puedes cambiar de animal, ser un perro y ladrar: «Guau, guau, guau», o cualquier otra cosa que se te ocurra. Puede que solamente te mire, pero a lo mejor despiertas su interés por intentar imitar tu postura.
- Ponle juguetes a su alcance para que trate de cogerlos.
- Dale algún masaje en las piernas, pies, brazos y manos.
No debes darle excesiva importancia al hecho de que "tiene que gatear". Es bueno que gateen, pero si no lo hacen NO PASA NADA.
Un beso.